Monday, September 05, 2016

BUSCAN INCLUIR LITIO EN EL AGUA POTABLE. DOSIS BAJAS DEL MINERAL REDUCIRÍAN CASOS DE DEPRESIÓN, SUICIDIOS Y, EN TEORÍA, EL ALZHEIMER.

De color blanco, blando y de los alcalinos, el más liviano. Ese es el litio, un metal empleado en la fabricación de baterías más livianas y eficientes.
Desde los años 50 las sales de litio han sido parte del tratamiento de las personas maníaco depresivas o con trastorno bipolar. Con el tiempo y los buenos resultados, se amplió su uso para las depresiones profundas.
Hoy los especialistas la están proponiendo como un agregado para el agua potable ya que se ha visto que en las zonas donde se ha utilizado, disminuyen los casos de suicidios y podría tener un efecto neuroprotector de otras demencias y enfermedades neurodegenerativas como el alzheimer.
El Centro de Envejecimiento y Regeneración (CARE Chile UC) ha estado estudiando este tipo de aplicaciones para las sales de litio. Nibaldo Inestrosa, director del CARE y Premio Nacional de Ciencias Naturales 2008 señala que adicionarlo al agua, puede ser beneficioso no solo porque puede reducir los suicidios, sino porque también puede ayudar, en teoría con el alzheimer y el párkinson.
Algunos trabajos publicados en la revista European Journal of  Nutrition han mostrado que en animales y humanos, aumenta también la esperanza de vida.
Hace cinco años se publicó un estudio que recogió los resultados del análisis al agua potable en Austria, donde dependiendo de la zona, el agua tiene, en forma natural, distintas concentraciones de litio: en aquellos lugares con más litio habían menos suicidios. En Grecia se repitió el análisis y los resultados fueron los mismos.
¿Cómo funciona?
Las sales de litio estimulan el proceso de neurogénesis o formación de neuronas nuevas en el hipocampo, la zona del cerebro que está asociada al aprendizaje y la memoria.
“En otros estudios, el litio también mejoró significativamente el rendimiento de los ratones con síndrome de Down en tareas de aprendizaje contextual, memoria espacial y distinción de objetos”, explica el doctor Inestrosa.
El doctor Hernán Silva, psiquiatra de la Facultad de Medicina de la U. de Chile reconoce que el litio en algunas ocasiones puede transformarse en un medicamento de difícil manejo pero señala que estos efectos se pueden controlar con exámenes que permitan ajustar la dosis a cada paciente.
 “En el caso del suicidio no hay una actividad molecular definida. El litio actúa en varias partes. En concentraciones terapéuticas puede bloquear la enzima GSK3 beta que tiene un rol importante en el sistema nervioso central. Cuando se bloquea esa enzima, se protege a las neuronas y mejora la plasticidad sináptica”, dice Inestrosa. 
En otras palabras, pequeñas dosis de litio ayudan a que las neuronas se limpien a sí mismas, eviten acumular residuos y además coopera con la generación de nuevas neuronas.
Inestrosa reconoce que todavía es necesario realizar más estudios para evidenciar los beneficios y efectos secundarios de las sales de litio, pero es de los que cree que si se incorpora en el agua potable, como se hizo hace algún tiempo con el flúor, podría traer beneficios. (www.latercera.com)





¿POR QUÉ EVO MORALES NO CESA DE EQUIVOCARSE?

Infolatam de Argentina (www.infolatam.com)
                                                            
Por Fernando Molina.-  El camino del presidente boliviano Evo Morales ha dejado de ser uno de conquistas y alabanzas; cada vez se parece más a un ascenso al calvario. El reciente asesinato del encargado de la seguridad política del país, el viceministro Rodolfo Illanes, por una turba de bloqueadores de caminos que lo tenían secuestrado, constituye solo el último, aunque sin duda el más doloroso, capítulo de una larga serie de dificultades y errores políticos, que eran impensables apenas dos años atrás, cuando el 20 de este mismo mes Morales resultaba relecto por tercera vez con el 61% de los votos. Hoy este político tiene alrededor del 40% de la intención de voto, una cifra que sigue siendo importante, pero que se halla al final de una aguda curva descendente. Y la tendencia apunta a una caída cada vez mayor.
La ruta perdedora comenzó en 2015 con la aparición de problemas económicos internacionales, a causa de la disminución de los precios de las materias primas; continuó con dos sonados casos de corrupción que tocaron a la alta cúpula del Movimiento al Socialismo (MAS), el primero, y la del gobierno, incluyendo a Morales, el segundo. Si bien no se demostró que los principales gobernantes estuvieran involucrados, estos casos extendieron un manto de descrédito sobre todo el proyecto del MAS, que como dijimos hasta entonces solo cosechaba aplausos. Allí es donde Morales, reconocido como un muy hábil político –e incluso como un “genio” por sus adherentes–, comenzó la seguidilla de serias equivocaciones que lo trajeron hasta la situación actual. Frente a los escándalos, no articuló una respuesta gubernamental bien pensada, coherente y colectiva, sino que tomó decisiones fragmentarias, dejando que los hechos se sucedieran y que sus colaboradores actuaran inarmónicamente.
Fue entonces que sobrevino el golpe más duro. Cometiendo otra vez un error, Morales impulsó un referendo constitucional para asegurar el permiso legal de su siguiente reelección. Acababa de ganar unas elecciones y todo el asunto resultaba muy forzado. Era un momento, además, en el que Venezuela –país con el que se asocia las reelecciones sucesivas– se habían convertido en un mal ejemplo para seguir.  Pero el peor error del presidente fue abordar el referendo de una manera muy ingenua, sin siquiera contratar encuestas y mucho menos una empresa de estrategia electoral, según trascendió ulteriormente. Intentó ganar con una receta adecuada para otro tipo de elecciones y le fue mal: el 51% de la población rechazó la posibilidad de su reelección, un porcentaje que, atención, fue asegurado por la región de Potosí, ultraevista pero furiosa contra su exhéroe porque éste había vapuleado y ridiculizado una demanda suya para enfrentar la crisis de los precios de los minerales que la tenía preocupada.
Este primer conjunto de errores tiene una misma causa: Morales no es un líder, sino un caudillo, esto es, un inspirador de las masas y un acaparador del poder que no tiene facultades organizativas y carece de toda lógica meritocrática. De este modo, los otros dirigentes que finalmente se convirtieron en su “entorno” (el vicepresidente Álvaro García Linera, el canciller David Choquehuanca, y los ministros Juan Ramón Quintana, Carlos Romero y Luis Arce, cada uno a cargo de un grupo propio) solo necesitan obedecerlo para sobrevivir políticamente. Es más, deben obedecerlo para sobrevivir.
Entonces, si él no organiza adecuadamente algo, por ejemplo una estrategia de defensa frente a las acusaciones de tráfico de influencias que le cayeron por su relación con Gabriela Zapata –una arribista que se aprovechó económicamente del haber sido su novia–, entonces los demás dirigentes son incapaces de hacerlo. E incluso si pudieran no lo harían, dado el ambiente altamente competitivo en el que se mueven.
Como suele ocurrir, el caudillismo cobra el precio más alto al propio caudillo. Este sistema divorció a Evo de las masas que antes había logrado representar mejor que nadie en la historia boliviana. De ser el presidente de los “movimientos sociales”, como se llama a las organizaciones corporativas populares, pasó a ser el “rey” de un archipiélago de camarillas que disputan entre sí por su favor, y que lo consiguen por el medio suicida de impeler a Evo a elegir entre ellas y su propio movimiento, o entre ellas y las clases medias que en algún momento del pasado simpatizaron con el presidente.
Cada vez que Evo las elige, entonces, se aleja más del pueblo. A pesar de eso, Evo las elige siempre, no se atreve a cambiar de entorno desde hace casi una década, porque no puede confiar en nadie más que en quienes, por estar ya en el poder, se benefician del caudillismo. La otra opción ante él sería abrir el gobierno, lo que lo pondría en el camino democrático normal, esto es, sacaría al país del caudillismo. No es, por lo tanto, una opción fácil para él.
En esa medida, Morales es un rehén de su entorno, que por eso ha devenido impune: no importan las barbaridades que cometan los ministros, igual siguen en sus puestos. El entorno acepta esta relación –comparable a la de las parejas tóxicas– predicando que: a) el caudillo es providencial e imprescindible; b) todo ataque externo a las camarillas en el poder es un ataque al gobierno en su conjunto y, sobre todo, al presidente; c) por tanto, todo ataque es una conspiración, un intento de “golpe de Estado”: incluso si los actores son los aliados de antes (los movimientos sociales), pues hasta ellos actúan instrumentados por el imperio y buscan un “golpe blando”; y entonces: d) para defender el poder del caudillo hay que mantener a las camarillas.
Por supuesto, este esquema político cierra la mente del presidente a toda posible autocrítica (o a la inversa: porque éste se opone a la autocrítica tal esquema político es posible).
La falta de autocrítica sistemática impide que el gobierno adopte una estrategia política-comunicacional moderna, racional, que le permita recuperar el terreno perdido. Por el contrario, el afirmar la verdad intangible del caudillo-entorno lleva al gobierno a estrellarse más y más en contra de sus bases políticas.
Ahora, por ejemplo, los “pequeños” mineros privados que organizaron la protesta en cuyo marco se produjo el asesinato de Illanes se han convertido, como dijo un observador lúcido de la coyuntura boliviana, en “los peores enemigos de la nación”, bandidos capitalistas y agentes imperialistas, siendo que hace no mucho eran la principal fuerza de lucha política del MAS.
¿Por qué esta reacción al crimen sin duda imperdonable del viceministro? Porque es la que necesitan las camarillas para no ser sancionadas por su terrible negligencia en el manejo del conflicto, que paralelamente causó tres muertos en las filas mineras, algo que explica –pero no justifica– el asesinato de la autoridad. Tanto el ministro Quintana, a cuyo grupo pertenecía Illanes, como el ministro Romero, quien maneja la Policía, cometieron omisiones gravísimas que no causaron, claro está, pero sí facilitaron el trágico final de este. Al menos un comandante policial no atendió de manera profesional, es decir, inmediata, el llamado desesperado que hizo Illanes cuando se hallaba capturado.
Cualquiera puede ver, a la luz de lo aparecido hasta ahora en los medios, que apenas el viceministro fue capturado en un punto de bloqueo era necesario que las fuerzas del orden se replegaran del lugar para establecer mínimas condiciones de seguridad para el secuestrado. Pero no lo hicieron. Y, sin embargo, nadie ha renunciado hasta ahora y es improbable que Evo permita que esto ocurra.
El entorno ha quedado fuera de toda evaluación, suspendido en un limbo protector, con el argumento de que cualquier sanción en su contra contribuiría a la conspiración en marcha contra Morales. Increíblemente, nadie pagó políticamente la derrota en el referendo de febrero pasado. De este modo, involuntariamente, todo el desprestigio de los errores se carga sobre el propio presidente.
Este, sin embargo, no carece de culpa. Si su pensamiento fuera menos bipolar, menos confrontativo y, en última instancia, más sano y “bueno”, entonces podría darse cuenta de que el mundo entero no debe de estar en su contra sin que medie ninguna razón, por el puro deseo de echarlo del poder. Pero el pensamiento de Morales pertenece al tiempo de la guerra fría: lo ve todo en blanco y negro y no confía en nadie que no esté completamente dispuesto a obedecerlo. Y así es como ahora se entrega al juego con su entorno, desmintiendo el genio político que supuestamente lo llevó tan lejos.
A este paso, si todo sigue así, Evo terminará como uno de los caudillos oligarcas que ha habido en la historia boliviana: prisionero de palacio, delirante y odiado, teniendo que defenderse a sangre y fuego de sus enemigos, incapaz de gobernar, aunque todos los títulos le concedan este privilegio. En una situación similar, en suma, a la que hoy atraviesa Nicolás Maduro.
¿Hay salidas? Como resulta evidente del análisis que hemos hecho, algo aparentemente tan simple como un cambio de gabinete reviste hoy en Bolivia una importancia suprema. Solo si Morales se deshace de todas las camarillas que lo rodean y deja que el aire fresco de la crítica y la autocrítica entre por las ventanas cerradas a cal y canto de su oficina, tiene posibilidades de evitar el destino del “patriarca” imaginado/retratado por Gabriel García Márquez.





EVO MORALES DENUNCIA “GOLPE DE ESTADO”

Los Andes de Perú (www.losandes.com.pe)

El mandatario boliviano responsabiliza de los actos de violencia a la derecha boliviana, quienes con el respaldo de Estados Unidos y los mineros cooperativistas, buscan sacarlo del poder para poner nuevamente al país a disposición del imperio capitalista yanqui.
El jueves 25 de agosto, tal vez ocurrió en Bolivia uno de los acontecimientos más fuertes contra el gobierno de Evo Morales, pues un grupo de mineros cooperativistas radicales de Bolivia, secuestraron, torturaron y asesinaron al viceministro del Interior de ese país, Rodolfo Illanes, esto en demanda de su pliego de reclamos.
Tras este acontecimiento, el mandatario boliviano denunció que su gobierno se salva nuevamente de otro intento de golpe de Estado promovido por la derecha boliviana, quienes esta vez, en alianza con los mineros cooperativistas y el apoyo de empresas extranjeras, pretenden sacarlo del poder para apropiarse de nuevo de las riquezas del país altiplánico.
"Nunca el gobierno ordenó a la policía llevar armas letales. Sospechosamente ha habido muertos que tienen que ser investigados profundamente por las autoridades competentes. El fallecimiento del hermano viceministro Illanes duele mucho", dijo Morales.
Esta afirmación toma sentido luego de que en el año 2013, Morales expulsara de Bolivia a la Agencia de los Estados Unidos para el Desarrollo Internacional (Usaid, por sus siglas en inglés), a la que en esa oportunidad acusó de conspirar contra su gobierno.
“Estados Unidos sigue conspirando. Por eso hemos decidido expulsar a Usaid de Bolivia. Se va. Nunca más Usaid va a seguir manipulando y utilizando a nuestros hermanos dirigentes”, comunicó Morales al pueblo boliviano el 1 de mayo de 2013.
El mandatario boliviano explicó que tomó esa decisión debido a que la agencia de cooperación ejecutaba sus proyectos con fines políticos. El principal efecto fue la división de las organizaciones sociales. “Seguramente pensarán todavía que aquí se puede manipular políticamente, económicamente (a los bolivianos), esos son tiempos pasados”, dijo esa vez.
Del mismo modo, en el año 2008, Morales expulsó también a la agencia antidrogas estadounidense (DEA) y al entonces embajador de Washington en La Paz, Philip Goldberg, a quien acusó de conspirar contra su Gobierno al intentar planificar un golpe de Estado, intentando utilizar a dirigentes sociales.
Igualmente, el viceministro de Régimen Interior y Policía, Rodolfo Illanes, de 56 años, había viajado ese día a Panduro, a 160 kilómetros de La Paz, para negociar con los mineros en protesta. Allí fue interceptado por manifestantes y asesinado a golpes, de acuerdo con la versión oficial.
"Siento que en esta movilización de Fencomin (la cooperativa de mineros) había una conspiración política y no había una reivindicación social para el sector", afirmó el mandatario Morales, afirmando que todo obedecía a un intento de golpe de Estado.
Los mineros bloquearon esa semana la principal carretera de Bolivia, que une Cochabamba y Oruro, y se enfrentaron con la policía cuando intentó dispersarlos, lo que culminó con 17 agentes de seguridad heridos y, según representantes de los mineros, tres trabajadores murieron por disparos. Morales, en sus declaraciones, hizo referencia a sólo dos cooperativistas fallecidos.
Luego de la masacre, el cuerpo de Illanes fue encontrado en la madrugada del viernes 26 de agosto al borde de la carretera que une La Paz con Oruro, envuelto en una manta, esto según el fiscal a cargo del caso, Edwin Blanco. "La causa de la muerte ha sido básicamente por derrame cerebral. Hay costillas también fracturadas", explicó Blanco.
La protesta ha generado una fuerte tensión política porque los manifestantes, que exigen cambios en la Ley de Cooperativas Mineras para poder firmar contratos con empresas privadas, eran hasta ahora aliados clave del gobierno.
"Cualquiera sea la provocación de los opositores usando algunos sectores sociales, el pueblo boliviano no va a ceder para entregar sus recursos naturales a los privados, especialmente a los extranjeros", añadió Morales, el gran líder indigenista boliviano.
LA PROTESTA
El régimen de Evo Morales ha denominado a los mineros cooperativistas como un sector "consentido" y un importante soporte político al inicio de su gestión, al punto que hace apenas algunos meses los mineros apoyaron orgánicamente su intento de lograr una nueva reelección.
A diferencia de la minería privada y la estatal en Bolivia, los mineros cooperativistas tributan menos regalías e impuestos por sus ganancias y no tenían obligaciones laborales ni sindicales, hasta que ahora, Evo Morales aprobó una ley para que los mineros puedan sindicalizarse dentro de las cooperativas y exigir sus derechos y mejorar sus ingresos.
La reforma a la Ley de Cooperativas ahora sí permitirá la sindicalización de sus miembros, lo que desató la protesta de los mineros cooperativistas. El sector también demanda del gobierno mayores concesiones para la explotación y otros beneficios, incluyendo la posibilidad de entrar en sociedad con empresas privadas nacionales y extranjeras.
Los cooperativistas, además, quieren estar fuera de controles ambientales y un ministerio o viceministerio específico para su sector que los proteja. La muerte del viceministro Illanes se produjo en momentos en que mineros cooperativistas y el gobierno se preparaban para iniciar negociaciones en La Paz para analizar a fondo la reforma minera.
HISTORIA
Desde que Morales asumió el poder en 2006, el sector minero boliviano ha ido tomando un papel más dominante para el Estado. Bajo su gobierno, varios intereses extranjeros en el país han sido nacionalizados y sólo quedan unas cuantas minas de propiedad extranjera, incluyendo la muy importante mina de San Cristóbal, la cual es propiedad de Sumitomo de Japón.
Sin embargo, las cooperativas siguen siendo una fuerza importante, ya que emplean 90% de cerca de los 140 mil mineros que trabajan en Bolivia. Las cooperativas ofrecen empleos precarios a mineros empobrecidos que de otra manera carecerían de empleo.
Ha aumentado el número de mineros en las cooperativas debido a la ola de despidos en las operaciones mineras más establecidas. Ahora, los bajos precios de los minerales se han vuelto otro obstáculo para obtener empleo.
El año pasado, los mineros en Potosí, enfurecidos por lo que ellos consideraban una falta de inversión por parte del gobierno, organizaron un bloqueo que aisló a la ciudad durante varias semanas. Luego, mineros armados con dinamita marcharon en La Paz y ocuparon el Viceministerio del Interior.
Este año, los mineros cooperativistas, al ver que Morales ya no quiere continuar dándoles los privilegios que gozaban, piden la suspensión de la reforma minera, por ello, ahora vienen formando alianzas con la derecha boliviana y empresas extranjeras para luchar contra la política minera de Evo Morales, sin importar matar a quien sea e incluso, derrocar al mismo mandatario.
Con la muerte de Illanes, las negociaciones se han quedado truncadas y hasta la fecha, el gobierno boliviano ha detenido a 43 mineros, incluyendo a Carlos Mamani, director de la Federación de Cooperativas Mineras de Bolivia (Fencomin) para aclarar y encontrar a los responsables de la muerte del viceministro.





El neoliberalismo se impuesto por todo el mundo
                                                                                                           
¿EL FIN DE LA DÉCADA VIRTUOSA EN SUDAMÉRICA?
                                                                                                                                                                    
Caracterizada y definida esta década virtuosa, Álvaro García Linera, vicepresidente de Bolivia, asume el retroceso y lo explica por cinco contradicciones o debilidades que han estado presentes.

La Nueva Tribuna de España (www.nuevatribuna.es)

Que el neoliberalismo se ha expandido e impuesto por todo el mundo y que solo en algunos países sudamericanos se le ha hecho frente en los tiempos recientes es un hecho claro. Me estoy refiriendo a la Venezuela de Chaves y Maduro; el Brasil de Lula y de Dilma Rousseff; el Ecuador de Daniel Correa; la Bolivia de Evo Morales y Avaro García Linera; la Argentina de Cristina Kischner. Para evitar el contagio de esta resistencia hacia otros lugares desde los poderes hegemónicos políticos, económicos, mediáticos y académicos se emprendió una campaña brutal. Y esta campaña está teniendo éxito, tal como se han desarrollado los últimos acontecimientos políticos en Brasil y Argentina.
Un buen análisis sobre lo que supuso esta década virtuosa en Sudamérica, sobre lo que está ocurriendo y una posible alternativa contra el neoliberalismo para reiniciar el proceso progresista es la disertación impartida por el vicepresidente de Bolivia, Álvaro García Linera en la Facultad de Ciencias Sociales de la Universidad de Buenos Aires, Argentina, el 27 de mayo de 2016. Resulta muy interesante. Recurriendo a sus propias palabras “No estamos en un buen momento. Tampoco es un momento terrible. Pero este es un momento de inflexión histórica. Algunos hablan de un retroceso, de un avance los restauradores. Lo cierto es que en el último año, después de diez años de intenso avance, de irradiación territorial de gobiernos progresistas y revolucionarios en el Continente, este avance se ha detenido, y en algunos casos ha retrocedido, y en otros casos está en duda su continuidad. De manera fría, como lo tiene que hacer un revolucionario, tiene que hacer un análisis de plaza, en terminología militar, analizar las fuerzas y escenarios reales que hay, sin ocultar nada, porque dependiendo de la claridad del análisis que uno hace, es que sabrá encontrar las potencias, las fuerzas reales prácticas del avance futuro. Tales palabras serían extrapolables a la socialdemocracia europea, que anda totalmente desnortada. Álvaro señala sin ambages que hay un ataque contra todos estos cambios progresistas, ejecutados en esta década dorada, la década virtuosa de América Latina, que desde los años 2000, ha vivido los años de mayor autonomía y de mayor construcción de soberanía que uno pueda recordar desde la fundación de los Estados en el siglo XIX.
Esta década virtuosa latinoamericana la define con cuatro características muy claras. La primera fue política: fuerzas populares, trabajadores, campesinos, indígenas, mujeres, clases subalternas han asumido el control del poder del Estado. Se vuelven diputados, asambleístas, senadores, asumen función pública, se movilizan, hacen retroceder políticas neoliberales, toman gestión estatal, modifican políticas públicas, modifican presupuestos, y en diez años se ha producido una presencia de lo popular, de lo plebeyo, en sus diversas clases sociales, en la gestión del Estado.
La segunda es social: sindicatos, gremios, pobladores, vecinos, estudiantes, asociaciones, comienzan a diversificarse y a proliferar por distintos ámbitos. Se rompe la noche neoliberal de apatía, de simulación democrática, para recrear una potente sociedad civil que asume un conjunto de tareas en conjunción con los nuevos Estados latinoamericanos. En lo social, en Brasil, en Venezuela, en Argentina, en Bolivia, en Ecuador, en Paraguay, en Uruguay, en Nicaragua, en El Salvador, desde los años 2000, a la cabeza de gobiernos progresistas y revolucionarios se ha  producido una potente redistribución de la riqueza social  frente a las políticas de ultra-concentración de la riqueza, que había convertido al continente latinoamericano en uno de los continentes más injustos del mundo. Esta redistribución de la riqueza va a llevar a una ampliación de las clases medias, no en el sentido sociológico del término, sino en el sentido de su capacidad de consumo. Igualmente, América Latina va a llevar adelante la limitación de las desigualdades sociales que no habían podido lograrse en los últimos 100 años.
En lo económico, con mayor o menor intensidad cada uno de los gobiernos de estos Estados va a ensayar propuestas post-neoliberales en la gestión económica. No son todavía propuestas socialistas. Son propuestas post-neoliberales, que permiten que el Estado retome un fuerte protagonismo. Algunos países llevarán adelante procesos de nacionalización de empresas privadas o la creación de empresas públicas, la ampliación del aparato estatal, la ampliación de la participación del Estado en la economía, para generar formas post-neoliberales de la gestión de la economía, recuperando la importancia del mercado interno, recuperando la importancia del Estado como distribuidor de la riqueza, recuperando la participación del Estado en áreas estratégicas de la economía.
En política externa, se va a constituir una internacional progresista y revolucionaria a nivel continental. En esta década, la OEA, que anteriormente decidía los destinos de nuestro continente bajo la batuta de Estados Unidos, que ponían el dinero y ponían con eso todas las disposiciones, surgirá la CELAC, surgirá la UNASUR, surgirá una integración propia de latinoamericanos, sin Estados Unidos, sin la necesidad de tutelajes, sin la necesidad de patrones.
En resumen, el continente, en esta década virtuosa, llevó adelante cambios políticos: la participación del pueblo en la construcción de Estados de nuevo tipo. Cambios sociales: redistribución de la riqueza y reducción de las desigualdades. Economía: participación activa del Estado en la economía, ampliación del mercado interno, creación de nuevas clases medias. En lo internacional, integración política del Continente. No es poco en diez años, que son quizás los años, desde el siglo XIX, más importantes de integración, de soberanía, de independencia, que ha tenido nuestro continente.
Caracterizada y definida esta década virtuosa, Álvaro asume el retroceso y lo explica por cinco contradicciones o debilidades que han estado presentes. Una primera debilidad, son las contradicciones al interior de la economía. Nos dice, es como si le hubiésemos dado poca importancia al tema económico al interior de los procesos revolucionarios. Y ese es un peligro, porque recurriendo a  Lenin: la política es economía concentrada. Estando en la oposición, cuando uno es opositor no gestiona nada. Lanza un proyecto de país, irradia una propuesta económica, pero no gestiona. Su convocatoria hacia el pueblo es en función de propuestas, iniciativas, sugerencias, pero no todavía en función de gestión.  Cuando uno es opositor importa más la política, la organización, las ideas, la movilización, acompañada de propuestas de economía más o menos atractivas, creíbles, articuladoras. Pero cuando uno es gestión de gobierno, cuando uno se vuelve Estado, la economía es decisiva. Y no siempre los gobiernos progresistas y los líderes revolucionarios han asumido la importancia decisiva de la economía cuando se está en gestión de gobierno. La economía es decisiva. En la economía nos jugamos nuestro destino como gobiernos progresistas y revolucionarios. Si no hay los satisfactores básicos, no cuenta el discurso.
Una segunda debilidad en el tema económico. Algunos de los gobiernos progresistas y revolucionarios han adoptado medidas que han afectado al bloque revolucionario, potenciando al bloque conservador. Un gobierno debe gobernar para todos, es la clave del Estado. Pero gobernar para todos no significa entregar los recursos o tomar decisiones que por satisfacer a todos debiliten tu base social que te dio vida, que te da sustento y que son al fin y al cabo los únicos que saldrán a las calles cuando las cosas se ponen difíciles. No puede haber ningún tipo de política económica que deje de lado a lo popular. Creer que se va a ganar el apoyo de la derecha, o que va a ser neutralizada, es un error descomunal, porque la derecha nunca es leal.  Algunos desde el lado de una supuesta izquierda, más izquierda, aducen que el problema fue que los gobiernos progresistas no tomaron medidas más duras de socialización y de levantar el comunismo y de acabar con el mercado y disolverlo, como si el problema fuera un tema de voluntad o de decreto. Se puede sacar un decreto que diga que no hay mercado, sin embargo, el mercado va a seguir. Un país no puede volverse autárquico. Ninguna revolución ha aguantado ni va a sobrevivir en la autarquía ni en el aislamiento. O la revolución es mundial y continental o es caricatura de revolución.
Y en lo económico, evidentemente, los gobiernos progresistas y revolucionarios supusieron un empoderamiento de trabajadores, de campesinos, de obreros, mujeres, jóvenes, con mayor o menor radicalidad según el país que se tome en cuenta. Pero un poder político no va a ser duradero si no viene acompañado de un poder económico de sectores populares. ¿Qué significa eso? En cada país habrá que resolverlo. Pero poder político tiene que ir acompañado de poder económico, porque si no se va a seguir presentando la dualidad. Poder político en manos de los trabajadores, poder económico en manos de los empresarios o el Estado. Pero el Estado no puede sustituir a los trabajadores. Podrá colaborar, podrá mejorar, pero tarde o temprano tiene que ir disolviendo poder económico en los sectores subalternos. Creación de capacidad económica, creación de capacidad asociativa productiva de los sectores subalternos, esa es la clave que va a decidir a futuro la posibilidad de pasar de un post-neoliberalismo a un post-capitalismo.
El segundo problema que estamos enfrentando los gobiernos progresistas es la redistribución de riqueza sin politización social.  La mayor parte de nuestras medidas han favorecido a las clases subalternas. En el caso de Bolivia el 20% de los bolivianos ha pasado a las clases medias en menos de diez años. Hay una ampliación del sector medio, de la capacidad de consumo de los trabajadores, hay una ampliación de derechos, necesarios, sino, no seríamos un gobierno progresista y revolucionario. Pero, si esta ampliación de capacidad de consumo, si esta ampliación de la capacidad de justicia social no viene acompañada con politización social, no estamos ganando el sentido común. Habremos creado una nueva clase media, con capacidad de consumo, con capacidad de satisfacción, pero portadora del viejo sentido común conservador. ¿Y qué es el sentido común? Los preceptos íntimos, morales y lógicos con que la gente organiza su vida. ¿Cómo organizamos lo bueno y lo malo en lo más íntimo, lo deseable de lo indeseable, lo positivo de lo negativo? No se trata de un tema de discurso, se trata de un tema de nuestros fundamentos íntimos, en cómo nos ubicamos en el mundo. En este sentido, lo cultural, lo ideológico, lo espiritual, se vuelve decisivo. No hay revolución verdadera, ni hay consolidación de un proceso revolucionario, si no hay una profunda revolución cultural. Ese es el gran reto. Es decir, no hay revolución posible si no viene acompañada de una profunda revolución cultural. Y ahí estamos atrasados. Ahí la derecha ha tomado la iniciativa. A través de medios de comunicación, de control de universidades, de fundaciones, de editoriales, de redes sociales, de publicaciones, a través del conjunto de formas de constitución de sentido común contemporáneas.
Una tercera debilidad que estamos presentando los gobiernos progresistas y revolucionarios es una débil reforma moral. La corrupción es clarísimo que es un cáncer que corroe la sociedad, no ahora, sino hace 15, 20, 100 años. Los neoliberales son ejemplo de una corrupción institucionalizada, cuando amarraron la cosa pública y la convirtieron en privada. Cuando amasaron fortunas privadas robando fortunas colectivas a los pueblos de América Latina. Las privatizaciones han sido el ejemplo más escandaloso, más inmoral, más indecente, más obsceno, de corrupción generalizada. Y eso hemos combatido. Pero no basta. No ha sido suficiente. Es importante que, así como damos ejemplo de restituir la res publica, los recursos públicos, los bienes públicos, como bienes de todos, en lo personal, en lo individual, cada compañero, presidente, vice-presidente, ministros, , parlamentarios, gerentes, en nuestro comportamiento diario, en nuestra forma de ser, nunca abandonemos la humildad, la sencillez, la austeridad y la transparencia. No podemos separar lo que pensamos de lo que hacemos, lo que somos de lo que decimos.
Un cuarto elemento de debilidad, es un cuarto elemento que se presenta en la experiencia latinoamericana, y que no la vivieron ni Rusia, ni Cuba, ni China, el tema de la continuidad del liderazgo en regímenes democráticos. Cuando triunfa una revolución armada, la cosa es fácil, porque la revolución armada logra finiquitar, casi físicamente a los sectores conservadores. Pero en las revoluciones democráticas, tienes que convivir con el adversario. ¿Cómo se resuelve el tema de la continuidad del liderazgo? Hay límites constitucionales para una persona. Ese es un gran debate, no fácil resolverlo. Hay varios países en los que se está atravesando ese proceso: Bolivia, Ecuador. Tal vez la importancia ahí de liderazgos colectivos, de trabajar liderazgos colectivos, que permitan que la continuidad de los procesos, tengan mayores posibilidades en el ámbito democrático. Pero incluso a veces ni eso es suficiente. Esta es una de las preocupaciones que corresponde ser resueltas en el debate político. ¿Cómo damos continuidad subjetiva de los liderazgos revolucionarios para que los procesos no se trunquen, no se limiten, y puedan tener una continuidad en perspectiva histórica?
Por último, una quinta debilidad, es la débil integración económica y continental. Hemos avanzado muy bien en integración política. Y los bolivianos somos los primeros en agradecer la solidaridad de esta Argentina, de Brasil, de Ecuador, de Venezuela, de Cuba, cuando hemos tenido que enfrentar problemas políticos. Y gracias a ellos estamos donde estamos. El Presidente Evo está donde está gracias a la solidaridad política de Presidentes y de los pueblos latinoamericanos. Pero integración económica, esto es mucho más difícil. Porque cada gobierno está viendo su espacio geográfico, su economía, su mercado, y cuando tenemos que leer los otros mercados, ahí surgen limitaciones. No es una cosa fácil la integración económica. Uno habla, pero cuando tienes que ver la balanza de pagos, inversiones, tecnología, las cosas se ralentizan. Este es el gran tema. Soy un convencido que América Latina solo va a poder convertirse en dueña de su destino en el siglo XXI si logra constituirse en una especie de Estado continental, plurinacional, que respete las estructuras nacionales de los Estados, pero que la vez con ese respeto de las estructurales locales y nacionales, tenga un segundo piso de instituciones continentales en lo financiero, en lo económico, en lo cultural, en lo político y en lo comercial.
La derecha quiere retomar la iniciativa. Y en algunos lugares lo han logrado, aprovechando alguna de estas debilidades. ¿qué va a pasar, en qué momento estamos, qué viene a futuro? No debemos asustarnos. Ni debemos ser pesimistas ante el futuro, ante estas batallas que se vienen. Marx, en 1848, cuando analizaba los procesos revolucionarios, siempre hablaba de la revolución como un proceso por oleadas. Nunca imaginó como un proceso ascendente, continuo, de revolución. Decía, la revolución se mueve por oleadas, Estamos ante el fin de la primera oleada. Y está viniendo un repliegue. Habrá una segunda oleada, y lo que tenemos que hacer es prepararnos, debatiendo qué cosas hicimos mal en la primera oleada, en qué fallamos, dónde cometimos errores, qué nos faltó hacer, para que cuando se de la segunda oleada, más pronto que tarde, los procesos revolucionarios continentales puedan llegar mucho más allá, mucho más arriba, que lo que lo hicieron en la primera oleada.
Y esta segunda oleada podrá ir más arriba porque tendrá unos soportes, un punto de partida que no lo vamos a ceder. Tendrá a una Bolivia, a una Cuba, a una Venezuela, tendrá a un Ecuador, firmes.
Son tiempos difíciles, pero para un revolucionario los tiempos difíciles son su aire. De eso vivimos, de los tiempos difíciles, de eso nos alimentamos. ¿Acaso no venimos de abajo, acaso no somos los perseguidos, los torturados, los marginados, de los tiempos neoliberales? La década de oro del continente no ha sido gratis. Ha sido la lucha desde abajo, desde los sindicatos, desde la universidad, de los barrios, la que ha dado lugar al ciclo revolucionario. No ha caído del cielo esta primera oleada. Traemos en el cuerpo las huellas y las heridas de luchas de los años 80 y 90. Y si hoy provisionalmente, temporalmente, tenemos que volver a esas luchas de los 80, de los 90, de los 2000, bienvenido. Para eso es un revolucionario. Luchar, vencer, caerse, levantarse, luchar, vencer, caerse, levantarse. Hasta que se acabe la vida, ese es nuestro destino.
Algo que cuenta en nuestro favor: el tiempo histórico está de nuestro lado. Ellos, lo decía el profesor Emir Sader, no tienen alternativa, no son portadores de un proyecto de superación de lo nuestro. Ellos simplemente se anidan en los errores, en las envidias, de lo pasado. Ellos son restauradores. Ya conocemos lo que hicieron con el continente. Argentina, Bolivia, Brasil, Ecuador en los años 80 y 90. Y nos convirtieron en países miserables, dependientes, nos llevaron a situaciones de extrema pobreza, de vergüenza colectiva. No representan el futuro. Son muertos vivientes electoralmente. Nosotros somos el futuro. Somos la esperanza. Hemos hecho en diez años lo que ni en cien años se atrevieron a hacer ni dictadores ni gobiernos, porque nosotros hemos recuperado la Patria, la dignidad, la esperanza, la movilización y la sociedad civil. Entonces ellos tienen eso en contra. Son el pasado. Ellos son el pasado. Ellos son el retroceso. Nosotros estamos con el tiempo histórico.





UN CHILENO TRAS LA HUELLA DE SU ORIGEN INCA

El abuelo boliviano del artista chileno Felipe Cusicanqui decía ser descendiente del soberano inca Túpac Yupanqui. Tras su muerte, el nieto viajó hasta allí para comprobarlo. Su travesía fue registrada en El príncipe inca, que se estrena este jueves en salas.

La Tercera de Chile (www.latercera.com)
                                                              
La idea de un príncipe inca de cabellos rubios, tez blanca y ojos celestes, resultaría tan absurda como la imagen que se ha popularizado de Jesucristo en el mundo occidental, a sabiendas de su origen árabe. Sin embargo, para el caucásico niño Felipe Cusicanqui (1977), la historia que le contaba su abuelo boliviano sobre su linaje inca a partir de que descendían directamente del soberano Túpac Yupanqui, no tenía derecho a discusión. “Nunca dudé de lo que me contaba mi abuelo, que además era apoyado por mi papá, o sea los dos patriarcas de la familia afirmaban que éramos príncipes incas y yo les creía absolutamente, eso me marcó mucho desde siempre”, dice Cusicanqui. Claro que sus compañeros de colegio eran más incrédulos al respecto. “Yo asociaba ese origen con mi cercanía con la tierra, hablaba con los animales y las plantas, los otros niños no me creían por supuesto y me hacían bullying”.
En 2011, convertido ya en un destacado artista en la escena local, Cusicanqui decidió emprender una travesía para descubrir qué había de cierto en las leyendas de su abuelo. Lo hizo alentado por la periodista Ana María Hurtado, quien ya conocía su historia y le hizo una propuesta que el pintor no pudo rechazar. “El tenía una historia pendiente, la que a mí me parecía demasiado interesante de conocer. Le ofrecí entonces financiarle un viaje a Bolivia  con la condición de poder grabar todo el proceso. De inmediato me dijo que sí”, recuerda Hurtado, quien se convirtiría cuatro años más tarde en la realizadora de El príncipe inca, documental que se estrena este jueves en 22 salas de la red Miradoc, que van de Arica a Coyhaique, y en seis salas multicines en Santiago y Viña del Mar. Además, el filme es uno de los preseleccionados para postular por Chile a los Premios Goya de 2017.
Una de las primeras incógnitas en despejar fue la veracidad de unos antiguos documentos del abuelo en los que se hablaba del linaje del apellido Cusicanqui. Una paleógrafa tradujo los textos fechados en 1545 y firmados por el propio rey Carlos V que demuestran que los antepasados del artista eran descendientes de Yupanqui, y dueños de tierras en Calacoto, Bolivia.
Una fiesta larga
El viaje, realizado en 2014 y planeado por Hurtado y su equipo, consistió en una travesía de 26 días por el altiplano boliviano, partiendo desde San Pedro de Atacama, pasando por Calacoto y finalizando en La Paz, donde el abuelo de Cusicanqui residió cuando era un treintañero recién casado. El artista fue a ciegas. “Me sometí a un viaje planificado, pero también tenía el poder de decidir en qué lugares del recorrido detenerme y explorar. Iba muy enfocado en olvidarme de las cámaras y de que el viaje fuese mío. Ya me había acostumbrado a ellas, porque hubo muchas grabaciones previas a mi trabajo en el taller. Fue muy enriquecedor esa doble mirada, el poder conocerme un poco más como artista antes y durante el viaje, al rastrear mi identidad. Al final el tema se tornó en algo cada vez más universal, la genealogía o la sucesión de títulos cobró menos importancia”, confiesa Cusicanqui.
En la primera parte del documental, se ve cómo el artista se infiltra en el paisaje, camina por el desierto, descubre ruinas incas en territorio boliviano, recoge algunos desechos -materiales que luego usará para hacer sus obras de arte- y se maravilla con la fauna autóctona del lugar. En un momento, incluso, el pintor ayuda a un pastor con una llama que tiene problemas para dar a luz. Entonces, pareciera que el objetivo de la travesía se ha perdido de vista. Sin embargo, la directora explica que todo era parte del plan. “Este tipo de situaciones son las más cómodas para Felipe y yo quería que él anduviera por estos paisajes asombrosos acordándose de su abuelo, fue un peregrinaje para él, pero también para todo el equipo”, dice Hurtado, quien ya había tratado los temas del pasado, la memoria, y la identidad en su primer documental, Palestina al Sur, ganador del  Premio a Mejor Película en el Festival de Documentales Al Jazeera, 2012.
Luego de 20 días recorriendo el desierto, el gran hito del viaje sería la llegada del artista a Calacoto, el pueblo originario de sus antepasados. Allí encontró una sorpresa: primos y tíos de apellido Cusicanqui lo esperaban para celebrar una gran fiesta familiar que duraría tres días. Hubo encuentros, pero también decepción. “Yo no me esperaba nada, menos que esta familia no sería la mía, ellos eran Cusicanqui, pero de una rama lejana a la de mi abuelo. Nunca lo conocieron ni tampoco a mi bisabuelo”, cuenta el pintor. “Lo bonito es que en el camino me fui conectando con cosas mucho más especiales, con la tierra misma, que va más allá de esa fantasía de ser y sentirse de la nobleza. Al final todo eso está borrado, sólo queda la leyenda”, agrega.
Para la directora, comprobar el origen del príncipe inca también pasó a segundo plano. “Tenía una importancia más que nada arquetípica en el guión. Muchos vivimos con esta clase de historia, a muchos nos han criado bajo una religión donde si eres hijo de Dios tienes un Reino asegurado, esa tierra prometida tiene un paralelo con la historia particular de Felipe y su abuelo, y ayuda a entender cómo el sentirse heredero de algo más grande nos marca como personas. Yo sabía que no íbamos a conseguir  un certificado inca, pero después de un tiempo eso francamente dejó de importar”, dice Hurtado.
Tras la larga fiesta en Calacoto, a Cusicanqui aún le faltaba un deseo por cumplir y ese era encontrar la casa donde vivió su abuelo en La Paz, la que resguardaba una pasada tragedia familiar que lo habría hecho regresar a Chile y nunca más volver a su país de origen.
“Este viaje fue una experiencia epifánica, pero no está todo resuelto. Me encantaría que mis hijos pudieran seguir explorando esta historia y por eso a ellos también se las transmito tal como mi abuelo y mi papá lo hicieron conmigo. Gracias a esa oralidad, la historia de mi familia sigue viva. Hay algo de romanticismo en eso, pero también de mucho orgullo de tener ese origen indígena”, dice Cusicanqui, quien tiene tres hijos, Silvestre (8), Manuela (6) y Aníbal (2).
Desde hace dos años, el artista vive con ellos y su esposa en Berlín, Alemania, donde por estos días prepara una exposición que exhibirá en Chile en noviembre, en la galería Patricia Ready, y luego en abril en la Galerie Born de Berlín. “Son obras realizadas en estos últimos tres años y por supuesto hay muchas que están inspiradas en el viaje que hice conociendo la historia de mi abuelo. Hay escenas de niños y de paisajes de Bolivia, pero también de Berlín, se trata de mostrar todo lo que uno puede ser al mismo tiempo, aquí y en otro lugar, antes y ahora”, resume.





¿EN QUÉ TRABAJAN LOS INMIGRANTES EN CHILE?

El 66% de los inmigrantes en el país tiene entre 20 y 50 años y la mayoría llega por razones laborales. En promedio, cuentan con más estudios que la población local. Estudios cualitativos -no hay cuantitativos- muestran que, por ejemplo, bolivianos se dedican al trabajo agrícola; ecuatorianos, a la medicina, y dominicanos, a la estética.

La Tercera de Chile (www.latercera.com)
                                         
Las razones para migrar pueden ser variadas, pero en Chile predomina el interés laboral. Preferencia que se refleja en que el 72% de las visas otorgadas en 2015 fueron de empleo (58% visas de empleo y 14% visas Mercosur).
La mayoría tiene entre 20 y 50 años (66%), una migración en la que predominan las mujeres: en 2014, 52,6% fueron mujeres y 47,4% hombres, según datos del Departamento Extranjería y Migración. 
Sus motivaciones son económicas y de empleo, y se les suele llamar migrantes económicos, explica Iskra Pavez, socióloga y académica de la U. Bernardo O’Higgins. “Existen dos categorías de migrantes económicos: los que vienen a ocuparse en empleos precarios y los migrantes altamente calificados, en cuyos casos se habla de fuga de cerebros, cuando son profesionales”. Dos categorías, dice, reflejo de la segregación del trabajo que existe en Chile.
Se concentran en algunas regiones, principalmente Arica y Parinacota (5,8% de la población total de la región), donde aumentaron 111% desde 2005. Bolivianos (52,7% de la población migrante) y peruanos (33,1%) tienen la mayor presencia.
Antofagasta (4,6% respecto del total regional) y Santiago (3,5%) son las otras regiones donde hay más inmigrantes. 
En la Región Metropolitana aumentaron 101% desde el año 2005.
Areas de especialización
Si bien no hay estudios cuantitativos sobre su distribución en los distintos campos laborales, investigaciones cualitativas realizadas por Pavez permiten entender cómo se distribuyen hoy. 
Así, desde los 90, las mujeres peruanas han ocupado el nicho de servicio doméstico,  fenómeno que hoy, con las mujeres ecuatorianas y bolivianas, dice, está cambiando. 
Los trabajadores peruanos se han especializado en construcción y comercio. También en gastronomía han capturado un nicho.
“En la zona norte, en Arica y Parinacota, el trabajo agrícola ocupa mucha población boliviana. Mujeres y hombres de República Dominicana se dedican a estética y peluquería. También hay harto ingeniero español en la minería. De Venezuela hay un porcentaje importante de médicos, junto con Cuba”, señala la socióloga. 
La comunidad más difícil de estudiar es la argentina, que se dispersa en varias áreas, aclara. “Una migración más antigua y tradicional es el comercio coreano y chino, enfocado al área textil y venta al detalle”.
Más años de estudios
Contrario al prejuicio, los inmigrantes destacan por tener más años de estudios que los chilenos; 12,6 años contra 10,7.
 En los cinco niveles de formación educacional, en la Región Metropolitana la población inmigrante supera a la nacional en los niveles medios, técnicos y universitarios. Allí destaca la formación secundaria de la población boliviana (39,1% tiene estudios universitarios), colombiana (23,7%), argentina (21,5%) y haitiana (15,4%). 
La informalidad, en tanto, es más alta en Arica -el 24,8% no está en el sistema de salud- y Antofagasta, donde el 15,6% no tiene seguro. 
Que puedan ejercer su profesión en Chile, dice Pavez, depende de varios factores. Por ejemplo, convenios internacionales que faciliten la convalidación de títulos, como ocurre, por ejemplo, con Ecuador en medicina. “Por eso, hay mucho médico ecuatoriano en el sector público, pero no pasa lo mismo con Perú y Bolivia”. 
Su formación académica es sometida a prejuicios, explica Pavez. “Profesoras o enfermeras trabajan en servicio doméstico, sin que se valore su formación profesional en el sueldo”.  
Derechos laborales
El 84,4% de los inmigrantes en el país tiene contrato, contra un 15,6% que no. 
Tienen los mismos derechos laborales, pero no son tratados de la misma manera, dice Delfina               Lawson, de la Clínica Jurídica de Migrantes y Refugiados de la U. Diego Portales. “Eso les produce mucha rabia e impotencia”, agrega.  
Quienes relatan más discriminación son los que vienen de países más lejanos. “Cuanto más distintos a los chilenos son,  más aguda es la discriminación que viven, desde que le gritan en la calle, que no les respetan las condiciones de trabajo o violencia sexual en las mujeres”. 
Situaciones que se acentúan en el caso de ser afrodescendiente y pobre, indica Lawson. “El migrante en Chile sufrirá discriminación, y si es mujer, más todavía, o si es indígena o no habla el idioma, la discriminación es más grave”. 
Todo ello los excluye de opciones laborales. “Tienen más años de escolaridad, pero ocupan cargos de inferior jerarquía”, indica Lawson.
 Existe xenofobia, indica la socióloga, que se refleja en que culturalmente hay nacionalidades de prestigio y otras no. “Se considera inferior a una persona indígena o afrodescendiente, se lo ve como un migrante económico que escapa. En cambio, al extranjero blanco se lo ve como el aventurero  y no se habla de migrante, sino de extranjero”.





COCA COLA CAMBIÓ 59 FÓRMULAS POR NUEVA LEY DE ETIQUETADO

La multinacional, además, redujo el azúcar en 29 productos y planea usar la experiencia de "los sellos" para Perú y Bolivia.

La Tercera de Chile (www.latercera.com)
                                                                                
Nosotros cambiamos en los últimos 24 meses 59 fórmulas y a 29 les bajamos el contenido de azúcar”, dice el gerente general de Coca Cola para Chile, Dino Troni. El también encargado de Perú y Bolivia para la multinacional de bebidas agrega que la firma debió reajustar su receta con nuevos ingredientes para mantener el sabor de sus 68 productos, a fin de ajustarse a la nueva Ley de Etiquetado de Alimentos, que comenzó a regir el 26 de julio pasado.
“Hemos hecho un tremendo esfuerzo, los laboratorios están a todo vapor desde hace más de dos años ajustando nuestros productos para que estén dentro de las configuraciones y no aparecer con los discos Pare, y tenemos mucho que hacer todavía”, explica el ejecutivo, en una sala de reuniones de la Torre Oriente del Hotel Marriot. Rodeado de productos de la firma -que maneja 15 marcas y 296 presentaciones-, sostiene que a pesar de las dificultades y polémicas por la implementación de la norma, la experiencia será útil para otros mercados. “Perú y Bolivia están en una senda de ley de etiquetado al igual que Chile, y estamos replicando lo que hicimos aquí”, sostiene.
La normativa obliga a los productores a rotular los envases con un símbolo negro semejante al de un disco Pare, que alerta con letras blancas si los alimentos contienen niveles altos de azúcares, sodio, grasas saturadas y calorías.  Según los argumentos del Ministerio de Salud, la medida ayudará a atacar los altos índices de sobrepeso y obesidad, que afectan al 64,5% de la población chilena.
Algunas de las nuevas fórmulas son locales y otras provienen de las operaciones de la compañía en mercados donde opera. “Una de las fortalezas del sistema Coca Cola son sus laboratorios a nivel planetario y los ingredientes a los que tenemos acceso para poder hacer las mejores bebidas del mundo”, dice
Se vende más zero
Pese a que aún no está claro el efecto que “los sellos” podrían tener en los hábitos del consumidor, el objetivo de la multinacional fue aprovechar la creciente demanda por productos sin azúcar añadida o con baja concentración de ésta para empalmar la vigencia de la ley. “En el primer trimestre, apenas se acabaron las etiquetas viejas empezamos a usar las nuevas, con los sellos. Así, ya en febrero comenzaron a salir algunas partidas con los sellos, lo que nos permitió llegar al 100% el 26  de julio con la ley”, relata Troni.
En todo caso, el ejecutivo reconoce que desde hace ya dos años, los consumidores locales venían profundizando su apuesta por los sin azúcar. “Una tendencia que ya estaba establecida en la sociedad, pero recién a fin de año se podría hacer una verdadera evaluación”, asegura.
Lo que sí ya están experimentando es la menor compra de azúcar. “Nos hemos puesto la responsabilidad de ayudar a nuestros consumidores a administrar su consumo calórico. Es la forma de hacerse parte de la solución y no del problema de la obesidad en nuestros países”, sostiene el ejecutivo.
De hecho, según estadísticas de la compañía, Chile es el país latinoamericano donde más se consumen las bebidas zero o bajas calorías: casi al nivel de las operaciones europeas. “Hoy, más de un cuarto de nuestras ventas son  baja y cero calorías”, agrega Troni.
Macroembotelladora
Consultado por los rumores de unificación de embotelladoras en Chile, Troni sostiene que se trata de un tema que no ha sido analizado por la compañía. El año pasado, tanto en Estados Unidos como en Europa, Coca Cola agrupó a las embotelladoras independientes en macroenvasadoras, y en Perú, la mexicana Femsa absorbió a la operadora local Lindley.
Por ello, el mercado bursátil no ha dejado de especular con un posible negocio. En la Bolsa se da por seguro un eventual acercamiento de Femsa a Embonor -ligada al clan Vicuña y que opera parte del negocio de Coca Cola en el extremo norte de Chile y su totalidad en Bolivia- o Andina, firma ligada a los Said y que opera en el resto del país, además de Argentina, Paraguay y algunas zonas de Brasil.
El llamado sistema Coca Cola funciona así: la firma es dueña de las marcas, elabora y distribuye los concentrados y se encarga del marketing, mientras que sus socios en el mundo embotellan, empaquetan y distribuyen el producto. En el caso de Chile,  el 91% de la producción es de origen nacional. 
Por eso, cuando Troni habla de Chile, se refiere también a la huella económica de la marca comercial más famosa del mundo en el país. Citando cifras de un estudio que encargaron a PWC indica que el sistema genera en forma directa o indirecta más de 100 mil empleos y que si se suman los insumos, ventas, impuestos e inversiones, se podría decir que Coca Cola  “mueve” US$ 2.400 millones en este país. “Esta cifra es casi el 1% del PIB, de los cuales más de US$ 500 millones son impuestos recaudados por el sistema, ya sea por IVA, impuesto específico, etc.”, comenta, y adelanta que están preparando un libro con eso y las historias acumuladas por la firma en el país. “Son 75 años y estamos orgullos de ese hito”, dice.
Chile fue el tercer país de América Latina donde desembarcó la bebida más famosa de la tierra. Partieron en Perú y Ecuador. La Viña Concha y Toro fue la primera embotelladora.
Invierno largo
Con crecimientos entre 10% y 20% en el segmento zero o bajas calorías y entre 0% y 2% en el de las bebidas regulares cerrará este año Coca Cola Chile, estima Troni. Al año, la firma vende US$ 1.800, según cifras de la consultora Nielsen.
Por ello, la desaceleración de la economía no ha pegado tan fuerte en las ventas. “Sumando y restando, es un año más lento que el año pasado. Pero tenemos la esperanza de terminar en línea con nuestras expectativas ahora que el clima se está afirmando un poco…”, sostiene, y explica que cuando hay inviernos más fríos o lluviosos como el actual en la zona central, la gente compra menos bebidas.
La firma está ampliando su menú de productos. Coca Cola quiere protagonizar la mayor parte de las ocasiones de consumo de bebestibles posible y por eso pronto añadirá a su portfolio AdeS, la bebida de soya que acaba de ser adquirida por US$ 575 millones. A Chile también llegarán Smartwater, una agua mineralizada premium; Zico, una bebida de agua de coco; el té frío Gold Peak Tea y la proteica Core Power.





TÉCNICO DE BOLIVIA: "NO ME GUSTA SACARLE BENEFICIO A MI RELACIÓN CON GUARDIOLA"

Ángel Guillermo Hoyos, uno de los formadores de Messi, Busquets y Pedro, entre otros, resalta el poderío colectivo de la Roja. Eso sí, advierte que el combinado altiplánico llegará al Monumental a pelear su chance. "Tenemos con qué ganarle a Chile", advierte.

La Tercera de Chile (www.latercera.com)

Se nota ilusionado Ángel Guillermo Hoyos (argentino, 53 años). Cuando recibe la llamada de La Tercera está en pleno proceso de preparación del duelo que, finalmente, le ganó a Perú. De reojo, sin embargo, también comienza a mirar el compromiso de mañana frente a Chile, un partido que puede resultar clave para la aspiración que, sin tapujos, reconoce: clasificar al Mundial de Rusia 2018.
El técnico transandino, quien jugó en Everton, en el arranque de su carrera como entrenador dirigió a una serie juvenil del Barcelona en la que estaban Gerard Piqué, Pedro, Sergio Busquets y Lionel Messi. Hoy habla de Chile con respeto. Y más que eso, con gratitud. “Siempre me trataron bien. Admiro su fútbol y guardo gratos recuerdos de su gente, del país, de su estilo de vida. Este es un partido de fútbol y quiero ganarlo, pero no puedo perder de vista lo bien que me recibieron y la forma en que nos acogieron, a mí y a mi familia”, resalta, antes de entrar de lleno al análisis de su desafío y del choque de mañana, en Macul.
Cuando usted asumió, Bolivia estaba penúltima en la tabla de posiciones de las Eliminatorias, con apenas tres puntos. Por eso, en definitiva, lo contratan. ¿Cómo pretende sacar de ahí a su Selección?
Primero, confiamos enteramente en la calidad del jugador boliviano. Por eso aceptamos, en conjunto con mi cuerpo técnico, esta tarea. Hemos estado acá 18 meses en Bolívar, consiguiendo cosas importantes, incluso a nivel internacional. Se pueden hacer cosas. Hay muchos jugadores de calidad enorme, hay condiciones. Uno llega para tratar de aportar y darle lo mejor para los chicos. A veces las cosas salen o no. Las condiciones hay que encausarlas, llevarlas para que puedan plasmarse en el campo de juego. Es un camino todavía largo. Podemos hacer buenos partidos.
Recién el 4 de agosto asumió su puesto. ¿Cree que puede aspirar a un buen resultado ante Chile, un rival mucho más trabajado como conjunto?
Tengo un respeto máximo por todas las selecciones. Chile es un rival muy importante de enfrentar. Está entre las mejores selecciones del mundo y no se lo regaló nadie. Se lo ganó con sacrificio, por la calidad de sus jugadores. Soy un admirador de la selección chilena. Me llaman la atención los procesos que han hecho. Primero con Bielsa, con todo lo que conlleva su nombre y trabajo. Fui admirador de eso. Sampaoli continúa una línea, con retoques personales. Pizzi conoce el fútbol chileno y suma logros. Hay continuidad y jugadores en el exterior en un nivel muy alto, que juegan Champions, ligas importantes. Está en un momento histórico
¿Es muy superior Chile a Bolivia?
No te lo puedo decir, porque sería menospreciar lo que somos. Tenemos nuestras posibilidades. Debemos crecer, tratar de que este sueño se convierta en opción permanente. El día 6 (mañana) puede pasar cualquier cosa. Estamos muy ilusionados. Es una competencia y vamos a tratar de darla.
En la Copa América Centenario, Bolivia tuvo muy complicado a Chile. De hecho, sólo a última hora y con un penal polémico pudo ganarle. ¿Cuál es el camino para neutralizarlo?
Chile es una Selección muy importante, pero buscamos nuestro lugar, nuestro espacio en el fútbol. Tenemos con qué pelearle a Chile. De ellos, me gustan sus transiciones rápidas, la circulación, su juego de inicio y como crean y desarrollan. Hace mucho que juegan juntos. Se conocen bien como camada. El colectivo es el fuerte de Chile. Es de los mejores del mundo. Tiene muchos quilates para coronar una actuación histórica.
Vidal declaró hace unos días que Chile es la mejor Selección del mundo. ¿Comparte esa apreciación?
Es respetable, pero hay muchas selecciones en ese nivel. 
¿Es muy distinto este Chile respecto del de Sampaoli?
Personalmente, no le he visto mucha diferencia. Sí algunos toques. Chile mantiene una línea, que es lo más lógico, porque traían buenos resultados. Han cambiado pocas cosas. Puede que sea más pausado, más de combinaciones, pero sigue haciendo esa presión asfixiante que no te deja salir. Tiene una transición combinada a nivel de juego, que ya no es tan frenético.
¿Cuál lo interpreta más?
La combinación, en general. Me gusta el juego de combinación. Ahí tiene que haber una transición de velocidades y factor sorpresa. La belleza de los velocidades es la que marca diferencias en el fútbol. Habilidad, control, creatividad. Por eso el fútbol evoluciona. También hay que tomar resoluciones muy rápidas. Chile lo hace. 
¿Cuáles debilidades pretende aprovechar?
Si las tiene, no se las voy a decir. Es difícil encontrarlas. Junto a mi cuerpo técnico, los tenemos bien estudiados. 
¿Le pesan a Chile las ausencias en la defensa y la de Marcelo Díaz en el mediocampo?
Claro que pesan, pero las grandes selecciones tienen recambio permanente, porque hay grandes jugadores en el país. Chile ha evolucionado enormemente, tiene jugadores de exportación, de calidad importante. No creo que les afecte demasiado.
¿Y la de Bravo en el arco?
Bravo es de los mejores arqueros del mundo. De los dos mejores con los pies, junto con (Manuel) Neuer. Son jugadores de un nivel extraordinario. Creo que hay arqueros importantes en Chile, pero en esa ausencia pueden resentirse, por lo que transmite Bravo en materia de seguridad. Esperamos aprovecharlo, naturalmente.
¿Se justifica su renuncia a esta fecha eliminatoria?
No conozco los motivos. No conozco la persona, los motivos, nada. Como jugador, sí lo conozco. Puedo decir que cuando no juega un portero como Bravo sufre el fútbol internacional, por lo que significa, por lo que transmite.
¿Cuál es el objetivo de su proceso con Bolivia? ¿Cree factible aspirar a volver al Mundial, algo que no se da desde 1994?
La ilusión y el sueño de llegar al Mundial están. Por eso aceptamos este desafío. Día tras día vamos detrás de él. Estamos sorprendidos de la respuesta, de la disposición que hemos encontrado en este grupo de jugadores. Los conceptos hay que ir transmitiéndolos y eso se logra con tiempo y con trabajo. Hay jugadores que tienen una edad importante, otros jóvenes, pero que también tienen experiencia. Estamos muy entusiasmados por lo que nos tocará hacer.
¿Cuál será su propuesta de juego ante Chile?
Eso me lo puedo guardar un poquito, ¿no?. Pero la idea es tratar de jugar y dañar. Creo en la igualdad, no en la desigualdad, que es un menosprecio. Lucharemos por la posibilidad de ganar. Procuraré que tengamos equilibrio, como en todo en la vida.
¿Por qué decide reintegrar a Ronald Raldes y Marcelo Moreno Martins, quienes con Julio César Baldivieso estuvieron alejados durante un año?
Es gente que transmite más allá de una cancha. Son importantes para la sociedad incluso, ejemplos para los niños. Los necesitamos para un inicio y consolidar lo que queremos. Son gente de bien, buenos jugadores. Compiten a nivel muy alto. Como también tenemos a Bruno Miranda, un joven que se puede contagiar con ellos.
¿Cómo pretende conducir el proceso de renovación del fútbol boliviano?
Los procesos son a corto, mediano y largo plazo. A corto plazo, planteamos la inserción de jugadores importantes, experimentados, con muchas vivencias y que pueden ser ejemplo para los más jóvenes. Hay 95 jugadores en vista en esta forma de trabajar, que implica un seguimiento detallado de cada uno de ellos. Buscamos ahora para septiembre, octubre y noviembre. También está la Sub 20. Haremos un trabajo profundo. De formación y de cara al futuro. Queremos sentar bases sólidas en el fútbol boliviano.
¿Qué tan importante es, en ese escenario, Bruno Miranda, quien juega en Universidad de Chile?
No hay que olvidar que tiene 18 años y un camino importante. Tiene condiciones futbolísticas extraordinarias. Potencia, gol, desequilibrio. Paulatinamente iremos viéndolo más. Es un muy buen chico, sencillo, humilde. Miranda está en ese proceso de crecimiento. Mi PF habló con el PF de la U y charlaron de la parte física. En la U se trabaja muy bien también. Eso nos da mucha confianza.
Usted jugó en Everton ¿qué recuerda de su paso por el fútbol chileno?
Me llevó (Antonio) Bloise. No tuve mucho éxito, porque estuve lesionado, pero tengo un grato recuerdo. Viña del Mar es una ciudad maravillosa. Mis hijos estudiaron ahí. Chile es un país bárbaro. Siempre hubo posibilidades para ir. El fútbol chileno marca un camino en Sudamérica. Como el argentino, el brasileño y el colombiano. El peruano y el uruguayo también crecieron. Por eso nosotros queremos hacer lo mismo.
En 2003 dirigió al juvenil B del Barcelona, donde tuvo a Piqué, Pedro, Busquets y Messi ¿Qué recuerda de esa experiencia, que siempre se menciona cuando se habla de usted?
Es una etapa maravillosa, porque Dios nos puso ahí. No creía que iba a llegar a eso. Uno no sabe dónde puede llegar. Fue maravillosa, emocionante y después, a la postre, tenerlos fue un privilegio. Compartir entrenamientos y campo de juego. Uno los ve hoy y es un paso importante. Como estar en la Selección, que tampoco lo esperábamos. Dios y la Virgen siempre están. Esa vez, se pusieron de nuestro lado.
¿Sospechaba que esos jugadores, particularmente Messi, iban a llegar a la estatus  que tienen hoy?
Hay cosas escritas, videos, publicaciones que ya hacían pensar que Leo no iba a tener techo y que iba a escribir páginas y páginas. Uno no podría imaginar que tendría cinco Balones de Oro. Hacía cosas extraordinarias. Debe ser el mejor de la historia. Me reservo la relación con él. No me gusta sacarle beneficio a mi relación con él. 
Habiendo conocido al Barcelona, ¿cree que Bravo tomó una buena decisión al dejar el club o debió quedarse para pelearle el puesto a Ter Stegen?
Ojo que donde va es un equipo de alta competencia también. De niveles extraordinarios, por lo que demanda el Manchester City, por su proyecto de trabajo y por el hecho de tener a uno de los mejores entrenadores del mundo, sino el mejor. Guardiola transmite no sólo lo que es el fútbol, sino lo que enseña fuera del campo. Con Guardiola, hay un aumento de capacidades futbolísticas y de otras también. No es un retroceso. Bravo puede crecer mucho con Guardiola. Puede seguir evolucionando. Le queda tiempo para eso.
En abril de 2012, según reveló José Carlos Fernández, gerente técnico de Bolívar de ese entonces, fue contactado como candidato para la banca de Colo Colo ¿Por qué no llegó?
Tuve posibilidades. También en la U. Me pone contento haber tenido esas opciones. Me enorgullece. Era el camino correcto. Fue una evolución permanente en la vida. Hoy estoy aquí. Uno sabe como es el fútbol y tengo la ilusión de un éxito importante en el fútbol, más allá del resultado. Creo en el proyecto, en las bases sólidas, en competir en categorías inferiores. A partir del 10 de septiembre empezamos una convocatoria Sub 20. Pero, claro, si se diera la posibilidad, me gustaría dirigir alguna vez en el fútbol chileno.





BME Y BBV PONEN EN MARCHA PLATAFORMA DE CONTRATACIÓN DE LA BOLSA DE BOLIVIA

Investing de España (www.es.investing.com)
                                                         
Bolsas y Mercados Españoles (MC:BME) y la Bolsa Boliviana de Valores (BBV) han puesto en marcha la nueva plataforma de negociación en la plaza Latinoamericana como parte de la renovación de su mercado.
En un comunicado publicado hoy, BME ha explicado que el nuevo sistema tecnológico de la citada plataforma, denominado SMART BBV, ha sido diseñado y desarrollado por BME, y da soporte a varios de los mercados operados por el grupo, entre los que se encuentran los de Renta Variable y Renta Fija.
Con la puesta en marcha de SMART BBV, la Bolsa Boliviana de Valores avanza hacia la modernización tecnológica y funcional de sus mercados de instrumentos financieros en la que ha contado con la colaboración de BME, tanto en los trabajos de implantación como en su mantenimiento y soporte.
"Con este acuerdo, BME reafirma su compromiso con los mercados latinoamericanos en el marco de su proceso de internacionalización", ha dicho BME, que ha recordado que en proyectos de naturaleza similar y durante estos últimos años, Bolsas y Mercados Españoles ha implementado soluciones tecnológicas en Venezuela, Colombia, Chile, México, El Salvador, República Dominicana, Ecuador y Uruguay.





LA LANA DE LA VICUÑA, LA ÚLTIMA PREOCUPACIÓN ECOLOGISTA

Proponen que se castigue a los que vendan pelaje de animales muertos.

Clarín de Argentina (www.clarin.com)
                                       
La vicuña es un delicado camélido que habita a más de 4000 metros de altura en los Andes, lo que hace que su pelo sea una maravilla insuperable y un objeto de deseo del mercado de lujo. Fueron los Incas quienes aprendieron a esquilarla, y un investigador argentino el que rescató esa tradición que había estado olvidada por cinco siglos de comquista, lo que permitió la recuperación de la población del animal y el comercio justo de su precioso pelo. Su nombre es Obdulio Menghi.
Menghi, que fue funcionario de agencias de las Naciones Unidas y una autoridad mundial en el tráfico de fauna en riesgo de extinción, está presentando en el Congreso Internacional para la Conservación de la Natulareza (UICN), que tiene lugar en Hawaii, una moción para que se haga la trazabilidad de la fibra de vicuña (desde que es extraída del animal hasta que se expende en un negocio en forma de producto) y que se castigue a quienes comercializan pelo de animal muerto.
Esta moción tiene una larga historia, que empieza en los Andes peruanos en los años 90. La vicuña había pasado de una población de varios millones de ejemplares a sólo 12 mil seres vivos. Todo el mundo creía que era imposible esquilar un animal en pie, pero Menghi investigó en los archivos del Museo de Lima, y se dió cuenta que era posible recuperar una técnica ancestral de los Incas, cuya realeza era la única que podría acceder a usar prendas confeccionadas con esta magnífica fibra. Convenció, entonces, al chamán de un pueblo de Ayacucho, llamado Pampa Galera, de reintroducir la práctica. Funcionó. Y el poblado, que era un caserío, pudo acceder a un nuevo estándar de vida. Y la población de vicuñas superó en pocos años los 180 mil ejemplares.
Grandes compradores europeos aparecieron a comprar esta fibra, la más fina del mundo. Por eso, un abrigo hecho con lana de este animal puede costar 20 mil dólares. La práctica del "chaccu", el acto ritual de esquila del animal vivo, se extendió luego a Bolivia, Chile, Argentina y Ecuador.
Pero todos los éxitos tienen una cara oscura, y este es el del comercio ilegal. En 2012, empezaron a aparecer animales muertos para sacarle el pelo, de la manera más salvaje. Los textiles se encuentran tanto en mercados de Bolivia como en Suiza y Francia. Es muy fácil saber qué son prendas confeccionadas con pelo de animal cazado: cuestan la mitad de precio. El propio Menghi lo ha descubierto en mercados que van de Ginebra a Lyon. Y lo ha denunciado a la Interpol. Detrás de la matanza de vicuñas hay mafias, donde la política seguramente no está ausente.
Ahora, por eso, se someterá a voto en la UICN la moción por la vicuña, para que luego, la Convención sobre Comercio Internacional de Especies de Fauna y Flora Silvestre (CITES) lo haga de cumplimiento obligatorio para todos los países miembros. Argentina es uno de ellos. La medida propuesta por Menghi tiene el apoyo de varias organizaciones nacionales e internacionales.





PUERTO DE ARICA: GREMIOS Y EXPERTOS SE DIVIDEN ENTRE SU AMPLIACIÓN O UN TRASLADO

Alto tránsito de cargas bolivianas y colapso vial por los camiones son algunos de sus problemas actuales. El gobierno estudia la factibilidad de moverlo. Una posibilidad es la zona de Chacalluta.

La Tercera de Chile (www.latercera.com)
                                                                                           
Ampliar o mover el puerto de Arica. Esa es la cuestión. El pasado 18 de julio, el canciller boliviano David Choquehuanca viajó hasta esta ciudad nortina para, según sostuvo, comprobar si Chile cumplía con las obligaciones del Tratado de Paz y Amistad de 1904.
La parte más polémica de esa visita fue el acceso al puerto, donde tuvo que esperar cerca de cinco horas a que se le permitiera la entrada junto a su comitiva, reflotando la denuncia respecto de si las instalaciones entregan las facilidades para el tránsito de cargas bolivianas.
PUBLICIDAD
El movimiento de mercaderías a través de esta terminal ha experimentado una vertiginosa alza. Según cifras del propio puerto, entre 2004 y 2013 éstas aumentaron de un millón 92 mil toneladas a tres millones 22 mil toneladas, de las cuales alrededor del 80% proviene de Bolivia.
En el documento “Plan Especial de Zonas Extremas, Región de Arica y Parinacota”, realizado por el gobierno regional, se explica que “sin ocurrir algo extraordinario, en un lapso de cinco años las mercaderías aumentarían en 50%”.
De allí los rumores y demandas por ampliar el puerto o definitivamente moverlo, producto de la congestión vial que los camiones generan en la urbe y otros efectos colaterales. La posibilidad de trasladarlo también se vincula, según el texto del gobierno regional, al riesgo de tsunami que tiene la zona norte, ya que existen casi mil contenedores que podrían ser “verdaderos proyectiles”.
En la actualidad, este puerto es el sexto a nivel nacional en el ranking 2015 de movimiento de carga, elaborado por la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal). Pero, más allá de sus cifras, posee una relevancia político-internacional. Tras la visita de Choquehuanca, el agente ante el Tribunal Internacional de La Haya, José Miguel Insulza, también acudió a la zona. “El puerto de Arica es muy importante. Se entiende el valor que tiene esta ciudad en la política exterior chilena”, señaló.
Estudio de factibilidad
En el Plan Especial de Desarrollo de Zonas Extremas (Pedze) existen $ 1.250 millones destinados para un estudio de localización, a fin de determinar la factibilidad de mover el puerto. Al analizar la preferencia de ingreso y salida de las cargas altiplánicas, estas tienen una marcada preferencia por Arica, superando a Antofagasta, Iquique y Mejillones, que en 2014 movilizaron 293 mil, 182 mil y 530 toneladas, respectivamente, versus los más de tres millones de Arica.
La posibilidad de traslado también es refrendada en el Informe de Infraestructura Crítica para el Desarrollo, elaborado por la Cámara Chilena de la Construcción, donde se confirma que Arica “necesita dar el salto para satisfacer la creciente demanda del puerto por las cargas de Bolivia”.
La misma opinión tienen en la Corporación de Desarrollo de Arica y Parinacota (Cordap).  “Le presentamos al gobierno una serie de propuestas, entre ellas la construcción de un nuevo puerto y un nuevo barrio industrial en el sector Chacalluta, para crear un gran complejo de servicios logísticos”, expresó el gerente de la entidad, Sergio Giaconi.
Añadió que “el emplazamiento actual del puerto genera externalidades negativas, como el colapso de camiones en las vías de acceso, existencia de depósitos de contenedores en sitios del radio urbano y estacionamientos caóticos de camiones en la costanera”.
Desde la Empresa Portuaria de Arica (EPA), su gerente general, Iván Silva, expresó que se han realizado diversas acciones e inversiones para optimizar los sitios de almacenamiento de cargas bolivianas. “Hoy, el puerto tiene un porcentaje de ocupación de sus sitios no superior al 35%, con calados de 10 y 12,5 metros. De acuerdo a la proyección de demanda, en 2024 sería necesario el aporte de nuevos sitios, pero existe un análisis de adelantar estas inversiones, más por un tema de la necesidad de mejores calados que por ocupación de sus sitios”, dijo.
Agregó que “son múltiples las acciones desde el inicio de la concesión, en 2004, para mejorar y hacer más competitiva la atención, como la incorporación de cinco grúas móviles para contenedores y graneles y la construcción de un terminal de embarque de concentrados de minerales”.

No comments: